La sorpresiva evolución de Goku: Super Saiyan 4 en Dragon Ball DAIMA

El episodio 18 de Dragon Ball DAIMA revolucionó por completo las expectativas de muchos fans del anime y manga. En esta entrega, Goku alcanza el mítico Super Saiyan 4 para enfrentarse a King Gomah, un villano que irrumpe en la historia con un poder amenazante, capaz de poner en jaque a todos los defensores de la Tierra. Lo más intrigante es que este suceso, considerado fuera del canon durante años por su origen en Dragon Ball GT, ahora forma parte oficial de la narrativa, avalada por el mismísimo Akira Toriyama.

El episodio, titulado “Awakening”, muestra una batalla campal en la que Goku y sus aliados lidian con el poder abrumador de Third Eye, la técnica que convierte a Gomah en una auténtica máquina de destrucción. En el último momento, la aparición de Super Saiyan 4 cambia las reglas del juego. El dramatismo incrementa gracias a un detalle que los seguidores más acérrimos de la cultura japonesa ya discuten en redes sociales: la posibilidad de que esta nueva transformación solo sea accesible en el misterioso Demon Realm, un espacio paralelo donde el poder se rige por reglas diferentes a las que conocemos.

Un giro en la cronología oficial de Dragon Ball

Lo fascinante es que la historia de Dragon Ball DAIMA se ubica entre el final de la saga de Majin Buu y el comienzo de Dragon Ball Super. Según la cronología oficial, esto ocurre en el año 775, justo después de la derrota de Kid Buu. Sin embargo, nada había insinuado que Goku tuviese en su repertorio la transformación de Super Saiyan 4 en futuros eventos como el Torneo de la Fuerza. Este aparente vacío argumental podría explicarse porque la forma depende de condiciones únicas vinculadas al Demon Realm y a la intervención de personajes como Neva, el misterioso namekiano responsable de forjar las Demon Realm Dragon Balls.

La animación está a cargo de Toei Animation y, a pesar de que la serie concluye el 28 de febrero, la expectativa no deja de crecer. Diversas fuentes especializadas en manga y anime señalan que la trama, supervisada por Toriyama, está aportando una nueva dinámica a la cultura japonesa en torno a Dragon Ball, un fenómeno que no deja de reinventarse. El elenco de voces suma un encanto especial, con Masako Nozawa retomando el rol de Goku y un equipo de seiyuus que incluye nombres populares como Tomokazu Seki y Yoko Hikasa, entre otros talentos de la industria.

Muchos seguidores especulan que el Super Saiyan 4 podría ser un recurso efímero que desaparezca una vez finalice el conflicto con King Gomah, lo que justificaría la ausencia de esta forma en arcos posteriores de la cronología oficial. En todo caso, este episodio confirma que, al menos en Dragon Ball DAIMA, el Super Saiyan 4 ya es parte del canon. El resultado es un homenaje a la creatividad de Toriyama, quien continúa sorprendiendo con giros inesperados y expandiendo los horizontes de un universo que, décadas después, sigue marcando el ritmo en la cultura pop.

¿Habrá repercusiones más allá de este episodio? Muchos esperan ver cómo se integrará (o no) esta transformación en futuros proyectos animados o adaptaciones al manga. Lo cierto es que la pasión de los fans se ha encendido una vez más, y el debate sobre los límites del canon de Dragon Ball está lejos de agotarse. Con o sin Super Saiyan 4, la obra de Akira Toriyama demuestra que siempre hay espacio para la innovación dentro de una de las sagas más queridas de la cultura japonesa.